Una vez que hemos hablado qué cultura y organización debe existir en la empresa y los equipos, vamos a ver cómo deben trabajar.
Trabaja en bloques pequeños para reducir el riesgo
Otro principio fundamental heredado de Lean Manufacturing es la práctica de dividir el trabajo en pequeñas unidades, en su caso con el objetivo de reducir el inventario y obtener la máxima calidad.
Trasladado a Lean UX significa que sólo la cantidad de trabajo necesario se realizará para poder avanzar hacia delante, validando la hipótesis y continuando el desarrollo en base a lo aprendido. Con ello contribuimos a otro de los principios, el de reducir el desperdicio.
Descubrimiento continuo
Para realizar este proceso debemos involucrar al usuario o cliente en el proceso durante la fase de diseño y desarrollo de las ideas.
Muchas veces (en el caso de que se haga) este contacto, en vez de hacerse de forma regular se realiza al final, con el trabajo ya desarrollado. Por ello se deben definir encuentros seguidos mediante métodos cuantitativos o cualitativos que permitan obtener el feedback para la validación.
El objetivo es claro: entender que hacen los usuarios con tus productos y por qué lo están haciendo.
Por ello la investigación debe hacerse de forma regular y con todo el equipo implicado.
Este segundo punto (con todo el equipo implicado) es muy importante ya que normalmente sólo los UX Research hacen esta parte teniendo posteriormente que explicar los resultados al resto del equipo.
Al introducir a todo el equipo en la investigación consigues 3 cosas:
- Que desarrollen una mayor empatía por el usuario y sus problemas
- Entendimiento compartido de lo que ocurre y por que luego se van a tomar ciertas decisiones.
- Reducción de la necesidad de generar documentación que explique los descubrimientos de la investigación
GOOB (Getting out of the building)
Con esta expresión que significa literalmente “salir fuera del edificio”, Steve Blank, profesor de Stanford, quiere conseguir que los equipos salgan fuera de las salas de reuniones con sus interminables divagaciones y suposiciones, y que den a los potenciales usuarios la oportunidad de proveer feedback real tan pronto como sea posible.
Gracias a esta dosis de realidad verás que ideas no funcionan antes de malgastar más recursos en ellas.
Exponer el trabajo
Con este principio, se quiere que las ideas salgan de la cabeza o de las pantallas de las personas y se pongan a la vista de todo el equipo. Esto permite ver el estado del trabajo, creando un flujo de información compartida, de nuevas ideas y sugerencias que surgen en base a lo visto…
Métodos de generación de ideas basados en Design Thinking permiten que todo el mundo opine (incluso los más callados) y que la elección de las mejores ideas sea en base al conocimiento general de todos, y no sólo por decisión de un ente superior.
Priorizar el hacer sobre analizar
Existe más valor en crear una nueva versión que gastar medio día debatiendo sus ventajas en una reunión.
Son los usuarios los que tienen la ultima palabra para decidir si algo funciona o no. Debatir ideas sin datos basados en las investigaciones realizadas en un entorno real es un desperdicio.
Olvídate de los entrañables
Lean UX se centra en los objetivos que el equipo está logrando y no en los documentos que debe crear para ello.
Los documentos no satisfacen los problemas de los clientes, los buenos productos si.
Cuando existe la colaboración multi funcional, la conversación con los shareholders se centra menos en que artefactos se están siendo creados y más en que objetivo se está buscando satisfacer.
El equipo debe centrase en que características consiguen mayor impacto en el cliente. Los artefactos que use para obtener y comunicar ese conocimiento no son relevantes. Lo que importa es la calidad del producto medida por la reacción del mercado hacia el.