LLevo unos 10 años trabajando en empresas de todo tipo, grandes y pequeñas, y hablando con mucha gente sobre el tema, tanto dentro como fuera de España.
Como ya he comentado en anteriores artículos creo que una buena relación entre trabajador y empresa se basa en una confianza plena. En dar ambos lo mejor de si mismos para cuidar esa relación en beneficio de ambos.
Escritorio de bambú LILLÅSEN (IKEA)
Si no se confía en la responsabilidad del trabajador, el jefe debe estar constantemente encima, controlándolo. Qué hace, qué horario lleva… Eso a mi modo de ver, impide que la organización crezca de una forma sana, aparte de un desperdicio de recursos al tener a los managers haciendo de «padres».
Puede que en determinados puestos de trabajo con una alta rotación tenga que ser así, pero en el sector que me encuentro quiero pensar que no.
Trabajo presencial
Para mi la mayor ventaja que tiene el trabajo presencial es la posibilidad de interactuar con las personas directamente, y la creación de equipo. No digo que no se pueda crear equipo en remoto, pero creo que cuesta más.
Y es que pese a que hoy en día la comunicación es más directa y efectiva que nunca, se pierden matices, como los correspondientes a la comunicación no verbal, que son los que transmiten mayor confianza.
El roce hace el cariño, ya lo dice el refrán
He estado en varias empresas que por tener separados a 2 departamentos en distintas planta del edificio ya no existía ese sentimiento de grupo e implicación. Y eso que eran ambos desarrolladores! Que cuando son dos departamentos diferentes, Call Center y Devs, por ejemplo, la cosa empeora (menos mal que está UX por en medio intentando que se comuniquen je je!)
Creo que se podrían haber hecho muchas cosas por intentar evitar eso, pero volviendo al tema, el estar trabajando en remoto, obliga a realizar un mayor esfuerzo de empatía por esas personas que no conoces físicamente.
Trabajo en remoto
El trabajo en remoto tiene para mi varias ventajas:
- Acceso a los mejores profesionales allá donde estén, ya no tienes que preocuparte de buscar gente que viva en tu ciudad sino que tienes el mundo entero para buscar.
- Evitar perder tiempo y dinero en transporte (y menos contaminación en muchos casos). Ese ahorro de tiempo repercute en una mayor calidad de vida.
- Flexibilidad laboral. Normalmente las empresas que realizan este tipo de trabajo, al confiar en las personas, no les obligan a estar de 9:00 a 18:00 en su sitio, permitiendo que se organicen como quieran. Lo importante es que el trabajo salga.
- Muchas veces, el estar rodeado de personas, hace que haya estímulos que interrumpen el estado de «flow» propuesto por el psicólogo Mihály Csíkszentmihályi en 1975. El estar en remoto mucha veces hace que cunda más el tiempo de trabajo al no gastarlo en distracciones no productivas.
- Se evita que todos los trabajos se concentre en las ciudades más grandes, pudiendo vivir el trabajador donde desee. En España, hay muchas más oportunidades laborales en Madrid y Barcelona, y mucha gente se ve obligada a vivir allí si quiere prosperar profesionalmente. Esto es una serpiente que se muerde la cola, al masificarse y encarecerse estas ciudades, bajando su calidad de vida, y dejando otros núcleos vacíos.
- Ahorro de costes para la empresa al no necesitar pagar el alquiler de un local.
Esa mayor calidad de vida y confianza, genera en los empleados una sensación de gratitud y estima hacia la empresa. Los trabajadores se vuelven leales.
Creo que funciona mucho mejor cuando todos los miembros están en remoto, pero aun así con sólo una parte también funciona, siempre que exista la cultura y las herramientas adecuadas.
¿Algunos ejemplos? Ahí van…
- Definiendo unas Hot Hours donde todo el mundo tiene que estar disponible online para reuniones o por ejemplo, pairear en el caso de devs.
- Que todas las dudas y preguntas se generen a través de medios escritos como JIRA o Slack, permitiendo así su lectura a todos los miembros (con permisos) del equipo. Esto además consigue que se quede automáticamente guardado el histórico de las decisiones, en vez de en conversaciones en el pasillo entre solo 2 miembros. Obtenemos así 2 ventajas: la documentación se genera al responder las dudas, cuando si es una decisión hablada hay que perder tiempo dejándolo por escrito (si se hace bien y se documentan las cosas para tener una trazabilidad clara) y segunda, la comunicación no es invasiva ya que a no ser que sea urgente no interfiere con el trabajo que están realizando las personas en ese momento.
- Otra forma de resolver dudas o decidir sobre un tema, es mandando una convocatoria a las personas implicadas para tener una reunión que trate ese tema con una duración determinada.
- Existen multitud de herramientas para compartir el trabajo en tiempo real y que varias personas puedan realizar modificaciones de manera simultánea.
Lógicamente, esto implica una cultura de empresa muy concreta, y puede que algunas personas que vengan de otros entornos les cueste trabajar de esta forma.
En resumen, comparto plenamente que hay vínculos que se crean cuando se trabaja presencialmente que son mas difíciles de conseguir estando alejados. Tampoco digo que uno sea mejor que el otro. Está claro que ciertos trabajos nunca podrán ser remotos, y que determinadas personas no valen trabajar desde casa.
Por eso, para mi, creo que lo ideal es una mezcla entre ambas cosas, siempre que tengas la suerte de que en tu ciudad exista ese trabajo.
Que en determinados momentos puedas ir a la oficina, pero que si te apetece trabajar desde casa no sea un problema.
Me gustaría creer que en España existan (y espero que cada vez más) empresas con esta forma de trabajar, donde, de forma inicial se confía en los trabajadores y se base su valoración en los objetivos que cumplen y lo que aportan, independientemente del horario que desean llevar o su ubicación.